Tras las exposiciones de los tres bloques sobre la Didáctica de la Educación Artística y, perteneciendo al grupo del bloque 1, tengo que decir que, si bien es cierto que la exposición tuvo formato de clase magistral y fue muy completa en cuanto a contenidos, quizás nos faltó la parte dinamizadora: deberíamos haber contemplado la idea de hacer participar a los alumnos de manera activa. En cualquier caso, en "nuestra defensa" debo decir que nos encontrábamos ante una temática que todos conocían a la perfección (unos más que otros, pero al fin y al cabo a todos nos sonaba de algo) y nos planteamos la clase a modo de "repaso", por llamarlo de alguna manera. La falta de información en el texto de Marín sobre la didáctica desde la Antigüedad hasta el Romanticismo hizo que concentráramos esfuerzos en la búsqueda de una información más amplia, lo que supuso un handicap a la hora de buscar tiempo para plantear la clase de un modo más participativo.
En cuanto a los demás bloques, a diferencia de nosotras, los otros grupos sí plantearon actividades que realizamos como alumnos y que nos ayudaron a comprender la metodología de la enseñanza del dibujo y las artes plásticas desde el siglo XIX hasta la segunda mitad del siglo XX. Personalmente, el grupo que más me impresionó fue el último que expuso, bajo el bloque 3: segunda mitad del siglo XX. No hicieron falta demasiadas palabras para hacernos comprender qué dos corrientes de aprendizaje se llevaron a cabo en esta época: lo lograron a base de ejercicios prácticos dentro y fuera del aula. Fue muy ameno y dinámico, consiguiendo realmente el objetivo marcado: enseñar los nuevos conocimientos y afianzarlos en base a la práctica artística.
No hay comentarios:
Publicar un comentario